Pixilation es una mezcla entre la técnica de filmación y la de animación.
La diferencia es que en este caso no se trabaja con objetos sino con seres humanos
como “dummies” o muñecos articulados.
La cámara de fotos toma una fotografía y luego el animador indica al sujeto que se mueva,
esto se repite una y otra vez. Esta descomposición cuadro a cuadro del movimiento
desarticula el orden natural y genera una alteración muy visible en la forma en que el cuerpo
realiza cualquier acción.
Para un movimiento fluido de los personajes deben trabajar con al menos 6 fotos por segundo.
Algunos ejemplos para inspirarnos
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